Zacarías 14, 9

Zacarías 14, 9
El Señor será rey de todo el mundo. Aquel día el Señor y su nombre serán UNO

1 ene 2015

Y en el...



























“El Señor te bendiga y te proteja, 
ilumine su rostro sobre ti
y te conceda su favor.
El Señor se fije en ti 
y te conceda la paz.”

Números 6, 22-27





















Denuncia el Papa Francisco en su mensaje para la Jornada Mundial para la Paz que todavía hay millones de personas (niños, hombres y mujeres de todas las edades) privados de su libertad y obligados a vivir en condiciones de esclavitud. Estos son las siete nuevas formas de esclavitud que el Papa describe:
 
  1. Los trabajadores y trabajadoras, incluso menores, oprimidos desde el trabajo doméstico al de la agricultura, de la industria manufacturera a la minería.
  2. Los emigrantes que, en su dramático viaje, sufren el hambre, se ven privados de la libertad, despojados de sus bienes o de los que se abusa física y sexualmente. 
  3. Los que se ven obligados a la clandestinidad por diferentes motivos sociales, políticos y económicos, y en aquellos que, con el fin de permanecer dentro de la ley, aceptan vivir y trabajar en condiciones inadmisibles, en el trabajo esclavo.
  4. Los obligados a ejercer la prostitución, entre las que hay muchos menores, y en los esclavos y esclavas sexuales
  5. Las mujeres obligadas a casarse, en aquellas que son vendidas con vistas al matrimonio o en las entregadas en sucesión.
  6. Los niños y adultos que son víctimas del tráfico y comercialización para la extracción de órganos
  7. Los reclutados como soldados, para la mendicidad, para actividades ilegales como la producción o venta de drogas, o para formas encubiertas de adopción internacional.

28 dic 2014

Tiene que volver a ser SAGRADA

 Vivía entonces en Jerusalén un hombre llamado Simeón, hombre justo y piadoso, que aguardaba el consuelo de Israel; y el Espíritu Santo moraba en él. Había recibido un oráculo del Espíritu Santo: que no vería la muerte antes de ver al Mesías del Señor. Impulsado por el Espíritu, fue al templo.
Cuando entraban con el niño Jesús sus padres para cumplir con él lo previsto por la ley, Simeón lo tomó en brazos y bendijo a Dios diciendo:

Porque mis ojos han visto a tu Salvador, a quien has presentado ante todos los pueblos: luz para alumbrar a las naciones y gloria de tu pueblo Israel.»


Lucas 2, 22-40























E gracias a outra gran familia que me pasou esta preciosa foto