«No se turbe vuestro
corazón,
creed en Dios y creed también en mí.
En la casa de mi Padre hay
muchas moradas; si no, os lo habría dicho,
porque me voy a prepararos un lugar. Cuando vaya
y os prepare un lugar,
volveré
y os llevaré conmigo, para que donde estoy yo
estéis también vosotros.
Y adonde yo voy, ya sabéis el camino».
Juan 14,1-12
