Y a ti, niño, te llamarán profeta del Altísimo,
porque irás delante
del Señor (…) para iluminar
a los que viven en
tinieblas y en la sombra de muerte,
para guiar nuestros
pasos por el camino de la paz. »
Lucas 1, 67-79
La Palabra
era la luz verdadera,
que alumbra a todo hombre
Al inundo vino, y en el mundo estaba;
el mundo se hizo por medio de ella,
y el mundo no la conoció.
Vino a su casa, y
los suyos no la recibieron.
Pero a cuantos la recibieron, les da poder para ser hijos de Dios,
Pero a cuantos la recibieron, les da poder para ser hijos de Dios,
si creen
en su nombre.
Juan 1. 1-18